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Arquitectos: Tadu Arquitetura
- Área: 50 m²
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Fotografías:Fran Parente
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Proveedores: Loja de Azulejos
Descripción enviada por el equipo del proyecto. De Primeira fue creado por dos chefs de São Paulo entusiastas de las populares tavernas de Río. Inspirados por el deseo de combinar el ambiente de Río y São Paulo, el dúo decidió abrir su propio bar en Vila Madalena - SP. El espacio ofrece comida y bebida sin complicaciones que recuerdan a los clásicos culinarios de los establecimientos tradicionales.
Identificar las particularidades arquitectónicas y los contrapuntos entre las dos ciudades fue fundamental para elaborar el universo estético y constructivo del proyecto. Colores y texturas navegan entre diferentes culturas, propiciando el encuentro entre pasado y presente, sol y lluvia, tradición y contemporaneidad.
La conservación de las características históricas del edificio y parte de los elementos estructurales se inscribía en el prudente proceso de creer en la resignificación y valorización de los espacios urbanos preexistentes de las grandes metrópolis.
La búsqueda de elementos característicos de la arquitectura de los bares establecidos reveló un abanico de posibilidades estéticas basadas en la identidad de diferentes regiones de Brasil -desde el suelo de caquinho rojo hasta los azulejos de colores de las paredes, pasando por la relación entre la calle y el bar, el conjunto de decisiones plásticas y estructurales sintetiza la búsqueda de armonía entre concepto, gastronomía, tradición, culturas y encuentros.
El espacio se organizó entre la acera, un salón, un mostrador, una cocina abierta, un cuarto de baño, un lavavajillas y el almacén superior. La cocina integrada permite contemplar la manipulación y preparación de alimentos y bebidas. Las actividades dentro del mostrador controlan la dinámica del espacio de la mesa, estimulando los sentidos de los visitantes: oído, olfato y vista. Además de las actividades en la zona cubierta, la acera es una parte fundamental de la socialización y el consumo. Las puertas y ventanas garantizan la relación entre el exterior y el interior.